Las instalaciones eléctricas de baja tensión se refieren a sistemas eléctricos que operan a tensiones relativamente bajas en comparación con las instalaciones de alta tensión o media tensión. La baja tensión generalmente se define como cualquier tensión eléctrica por debajo de 1.000 voltios en corriente alterna (CA) o 1.500 voltios en corriente continua (CC). Estas instalaciones son comunes en aplicaciones residenciales, comerciales e industriales, y se utilizan para alimentar dispositivos y equipos de uso cotidiano.
Aquí hay algunas características y ejemplos comunes de instalaciones eléctricas de baja tensión:
- Residencial: Las instalaciones eléctricas de baja tensión son típicas en hogares. Esto incluye el sistema de cableado eléctrico en una casa que alimenta electrodomésticos, iluminación, tomacorrientes y otros dispositivos eléctricos. La tensión en una vivienda generalmente oscila entre 110 y 240 voltios en corriente alterna.
- Comercial: Los edificios comerciales, como oficinas, tiendas y restaurantes, también utilizan instalaciones de baja tensión. Estas instalaciones alimentan sistemas de iluminación, equipos de oficina, sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado, así como sistemas de seguridad y comunicaciones.
- Industrial: Las instalaciones eléctricas de baja tensión se encuentran en entornos industriales para alimentar maquinaria, equipos de fabricación y sistemas de control. Esto puede incluir motores eléctricos, sistemas de automatización y tableros de control de procesos.
- Sistemas de iluminación: Las instalaciones de baja tensión son esenciales para sistemas de iluminación en todo tipo de edificios. Esto incluye la iluminación interior y exterior, sistemas de iluminación de emergencia y tecnologías de iluminación más eficientes, como la iluminación LED.
- Sistemas de comunicaciones: Las redes de comunicaciones, como la telefonía, la informática y las redes de datos, a menudo funcionan a baja tensión. Los cables de red y los equipos de comunicaciones operan a tensiones de baja tensión para garantizar la seguridad y el funcionamiento eficiente.
- Sistemas de seguridad: Los sistemas de seguridad, como sistemas de alarma contra incendios, sistemas de cámaras de vigilancia y sistemas de control de acceso, suelen funcionar a baja tensión para minimizar el riesgo de daños y aumentar la fiabilidad.
Es importante destacar que, aunque las instalaciones de baja tensión generalmente se consideran más seguras en comparación con las de alta tensión, todavía presentan riesgos eléctricos y deben diseñarse, instalarse y mantenerse adecuadamente para garantizar la seguridad de las personas y la propiedad. También deben cumplir con las normativas y regulaciones eléctricas locales para garantizar su funcionamiento seguro y confiable.